Hoy en día todavía se siguen repitiendo los ecos de la “fachistoide” nota de opinión del músico argentino Fito Páez (para el que no la vio es ESTA).
Para intentar analizar la nota es importante distinguir dos perspectivas que los medios, que se aprovechan siempre, nos quieren hacer ver como una sola. Por un lado tenemos al Fito ciudadano, que opina desde lo que piensa, y por otro lado tenemos la carga política que puede llegar a tener esta nota.
Describen muy bien la primera parte, las palabras que le dedico León Gieco:
“Políticamente correcto o no, Fito se la jugó. Como músico podés elegir entre ser un mero entretenedor o alguien comprometido con sus palabras y su tiempo. Seguro él habló y muchos odiaron sus palabras. Como muchos se aliviaron al escuchar en ellas sus propios sentimientos.
No recuerdo gente tan ofendida frente a hechos increíblemente más crueles y más graves que un artista expresando sin maquillaje su visión de este presente.”
Podemos coincidir todos en que dijo lo que pensaba, ¿Es tan criticable eso? Hay maneras y maneras de decir las cosas, está la sutil, la directa, la indirecta, etc. y Fito eligió ésta. ¿Podemos juzgarlo? ¿Quién puede? El tipo dice lo que piensa, y nadie tiene derecho a obligarlo a pensar distinto, tiene el mismo derecho que tenemos todos a opinar, con la diferencia de ser una persona pública. Cristian Aldana del otro yo dijo algo muy importante en 678, “Fito no la caretea”, y es verdad, dice lo que piensa, sin filtros, sin medir las consecuencias y eso es más que valorable.
Ahora, por otro lado, los medios (los de siempre), han armado una operación, tan básica como efectiva, de vincular las palabras de Fito a las del propio Kirchnerismo. Tanto estos como todo el “aparato” macrista han tomado una nota de opinión como un ataque del oficialismo, y han hecho lo que mejor les sale, victimizarse. Y, aunque esto demuestre lo faltos de ideas que se encuentran, hay que reconocer que otra vez, la movida les salió bien, corriendo el eje del debate. Evitando así discutir sobre lo que realmente importa, que es la pésima gestión de Macri. Las pésimas consecuencias que trajo y va a seguir trayendo.
Siguiendo en el hilo de la información varios artistas han salido a declarar sobre esto:
“La gestión de Macri es un desastre. Lo hecho por este tipo con la educación, con la salud y con el arte ha sido tremendo. Claramente no le interesa ninguna de esas cosas ni la cultura popular […]. Hoy la situación de la educación pública es terrible, porque está devaluada. Y una parte fundamental para el desarrollo de una sociedad es, sin dudas, la escuela [...] Ojalá cada día más gente pueda tomar conciencia de cuánto mal (Macri) nos hizo”. Palabras del ex líder de los Fabulosos Cadillacs, Vicentico.
Por su parte, Diego Capusotto indicó que está “abrumado por la tilinguería berreta de quienes gobiernan la Ciudad, gente que viene del ámbito empresarial, con toda esa estética de globos de colores tipo kermesse, a la usanza de los republicanos en Estados Unidos […] Gente que cree que la Ciudad es una gran agencia de publicidad y pretende administrarla como tal, con el cuento de la pretendida eficacia empresarial, que por supuesto nunca ocurre, o sucede sólo para el bolsillo de unos pocos. Básicamente creo que Mauricio Macri y el PRO son eso”.
En otra ocasión declaró que la gestión macrista busca “desplazar lo que molesta, lo que sobra: los pobres”. “Lo triste es que a mucha gente eso la tranquiliza y compra ese discurso, que es claramente estafador y que existe porque hay quien se deja estafar. Lamentablemente prende no sólo en sectores altos, sino en franjas de clase media baja. Lo de los hospitales es claramente un negocio inmobiliario a costa de la salud de los contribuyentes y de la exclusión”.
Para intentar analizar la nota es importante distinguir dos perspectivas que los medios, que se aprovechan siempre, nos quieren hacer ver como una sola. Por un lado tenemos al Fito ciudadano, que opina desde lo que piensa, y por otro lado tenemos la carga política que puede llegar a tener esta nota.
Describen muy bien la primera parte, las palabras que le dedico León Gieco:
“Políticamente correcto o no, Fito se la jugó. Como músico podés elegir entre ser un mero entretenedor o alguien comprometido con sus palabras y su tiempo. Seguro él habló y muchos odiaron sus palabras. Como muchos se aliviaron al escuchar en ellas sus propios sentimientos.
No recuerdo gente tan ofendida frente a hechos increíblemente más crueles y más graves que un artista expresando sin maquillaje su visión de este presente.”
Podemos coincidir todos en que dijo lo que pensaba, ¿Es tan criticable eso? Hay maneras y maneras de decir las cosas, está la sutil, la directa, la indirecta, etc. y Fito eligió ésta. ¿Podemos juzgarlo? ¿Quién puede? El tipo dice lo que piensa, y nadie tiene derecho a obligarlo a pensar distinto, tiene el mismo derecho que tenemos todos a opinar, con la diferencia de ser una persona pública. Cristian Aldana del otro yo dijo algo muy importante en 678, “Fito no la caretea”, y es verdad, dice lo que piensa, sin filtros, sin medir las consecuencias y eso es más que valorable.
Ahora, por otro lado, los medios (los de siempre), han armado una operación, tan básica como efectiva, de vincular las palabras de Fito a las del propio Kirchnerismo. Tanto estos como todo el “aparato” macrista han tomado una nota de opinión como un ataque del oficialismo, y han hecho lo que mejor les sale, victimizarse. Y, aunque esto demuestre lo faltos de ideas que se encuentran, hay que reconocer que otra vez, la movida les salió bien, corriendo el eje del debate. Evitando así discutir sobre lo que realmente importa, que es la pésima gestión de Macri. Las pésimas consecuencias que trajo y va a seguir trayendo.
Siguiendo en el hilo de la información varios artistas han salido a declarar sobre esto:
“La gestión de Macri es un desastre. Lo hecho por este tipo con la educación, con la salud y con el arte ha sido tremendo. Claramente no le interesa ninguna de esas cosas ni la cultura popular […]. Hoy la situación de la educación pública es terrible, porque está devaluada. Y una parte fundamental para el desarrollo de una sociedad es, sin dudas, la escuela [...] Ojalá cada día más gente pueda tomar conciencia de cuánto mal (Macri) nos hizo”. Palabras del ex líder de los Fabulosos Cadillacs, Vicentico.
Por su parte, Diego Capusotto indicó que está “abrumado por la tilinguería berreta de quienes gobiernan la Ciudad, gente que viene del ámbito empresarial, con toda esa estética de globos de colores tipo kermesse, a la usanza de los republicanos en Estados Unidos […] Gente que cree que la Ciudad es una gran agencia de publicidad y pretende administrarla como tal, con el cuento de la pretendida eficacia empresarial, que por supuesto nunca ocurre, o sucede sólo para el bolsillo de unos pocos. Básicamente creo que Mauricio Macri y el PRO son eso”.
En otra ocasión declaró que la gestión macrista busca “desplazar lo que molesta, lo que sobra: los pobres”. “Lo triste es que a mucha gente eso la tranquiliza y compra ese discurso, que es claramente estafador y que existe porque hay quien se deja estafar. Lamentablemente prende no sólo en sectores altos, sino en franjas de clase media baja. Lo de los hospitales es claramente un negocio inmobiliario a costa de la salud de los contribuyentes y de la exclusión”.
Por último, es importante analizar que es lo que hizo, que es lo que dejo de hacer y PRINCIPALMENTE que intereses representa, no nos olvidemos nunca que Mauricio es Macri.
Nuestro punto es: los medios dicen que este gobierno divide a la gente, lo que hacen ellos con esto ¿no es marcar dos bandos? Me refiero a los que piensan como Fito (según ellos los kirchneristas anti macristas) y la gente de Mauricio con su nueva postura de "queremos menos violencia y más felicidad”, que apunta a vendernos una gestión bien intencionada, y de esa manera cualquiera que lo critica parece ser un monstruo, alguien que no quiere el bien de la gente como él. ¿y a hacer política cuando nos dedicamos? es lamentable que no podamos discutir en definitiva lo que plantea Fito: a la gente parece ya no importarle el porvenir general, no se toma siquiera un minuto en analizar más allá de las apariencias o lo que uno mismo tiene y ¿qué es lo que hay en el gobierno y hacia donde vamos?
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